Declaraciones de José Antonio Olivares, presidente de la Cooperativa de Transportistas de Jumilla
M.C.C.V.
Según las informaciones a nivel nacional, está siendo escaso el seguimiento y afectación del paro indefinido convocado por los transportistas para protestar contra el encarecimiento de los carburantes. El cese de actividad llega sin el apoyo ni de las patronales, ni de los gremios del sector, ni de los sindicatos y ha sido convocado por la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional, que asegura representar a las medianas y pequeñas empresas que suponen el 85% del sector.
“Si no se arregla la situación, en 15 días no podremos seguir”
Sin embargo, a nivel local, según ha informado a esta redacción José Antonio Olivares, presidente de la Cooperativa de Transportistas de Jumilla, COTRAJU “casi el 95% de nuestros camioneros están parados, la mayoría por los piquetes y otros porque secundan el paro. Tenemos vehículos parados en lugares como Extremadura o Huelva, algunos conductores se han podido venir porque tienen sus camiones en sitios controlados, pero otros no, porque no los tienen en lugares seguros”. Olivares añade que “aunque nosotros pertenecemos a FROET y nos dijeron que no secundáramos el paro, los piquetes nos obligan a parar para evitar represalias y situaciones violentas”. Añade: “Aunque no hubiéramos parado ahora, si la situación no se arregla, tendremos que parar en quince días, porque no podremos pagar ni gasoil, ni a conductores”.
El presidente de COTRAJU asegura que “la situación es insostenible, el precio al que está el gasoil no se repercute en los cargadores, por lo que no se puede subir la facturación, en la que entre el 60-70% va para combustible, siendo nuestro principal gasto y así no podemos trabajar”. Según indica Olivares “dicen que van a quitar el IVA, pero a los transportistas no nos afecta, porque lo desgravamos, y no es un coste. Nos deben reducir los impuestos y bajar al menos, entre 40 y 50 céntimos el precio del gasoil, para poder seguir funcionando”.
Considera que el Gobierno debe actuar: “El 55 y el 60% de lo que vale el gasoil son impuestos y tienen que regular los precios para los profesionales”. José Antonio Olivares afirma que “el transporte mueve casi el 100% de la economía, si paramos, las fábricas no sirven a las plataformas de alimentación y no se pueden surtir a los supermercados. Nosotros trabajamos con empresas de alimentación que han tenido que cerrar porque no les llega suministro. Todo es una cadena. Incluso, a nosotros, aunque tenemos reservas, nos está casi faltando ya gasoil en la terminal”.
Por último, Olivares confía en que se logre algún acuerdo entre el Ministerio y el Comité Nacional de Transportes “aunque la solución no llegará de un día para otro, pero no deben dejarlo mucho tiempo, porque si no, todo será un caos”.
“Lo razonable sería que nos costara entre 75 y 80 céntimos”
En cifras globales, desde finales de enero, el gasóleo ha subido un 30,4%, hasta los 1,80 euros por litro del pasado viernes, aunque en algunas gasolineras ya supera los dos euros por litro. Por ello, llenar el depósito de un camión internacional, que suele tener capacidad para 1.500 litros, cuesta ahora 2.700 euros, frente a 2.070 de finales de enero, y podría superar los 3.000 euros, en caso de continuar la más que previsible escalada de los precios.
En este sentido, Olivares informa que las cooperativas compran el gasoil directamente de las petroleras, “no tenemos intermediarios, por lo que nuestros precios son los más baratos de la zona (1,67 para los cooperativistas), pero aun así tampoco podemos seguir trabajando. Algo razonable, sería que nos costara entre 75 y 80 céntimos el litro”.