Dos funciones de su espectáculo “Olé”, con el cartel de “entradas agotadas”. Integró en el cuerpo de baile del ballet Lo Ferro al bailarín jumillano, Chechu Tomás Calero.

Lola Tomás

Emilio Serrano sí fue profeta en su tierra, o “muy querido”, como él se siente, y todo ello después de nueve años sin volver a pisar el Vico.
El artista, coreógrafo y bailarín jumillano, afincado hace años en Madrid, llegó al Teatro Vico, bailó y triunfó, y el público le aclamó con una gran ovación, donde apenas le faltó la vuelta al ruedo, como a los grandes toreros.


Serrano presentó en su tierra natal su espectáculo “Olé”, que mezclaba el baile flamenco más puro, con una extraordinaria música en directo, con toques de lírico contemporáneo que no dejaron indiferente a nadie.


Un espectacular inicio de función con un Emilio Serrano en el centro del escenario y unas coreografías muy cuidadas y depuradas que ejecutaron a la perfección un maravilloso cuerpo de baile del ballet Lo Ferro.

Entre esos profesionales del baile se encontraba otro bailarín jumillano, Chechu Tomás Calero, al que Serrano quiso incorporar a su espectáculo y que dio lo mejor de sí junto al resto del gran equipo que pisó las tablas.


“Olé” se representó en dos sesiones, viernes y sábado, y en ambas se tuvo que colgar el cartel de “entradas agotadas”.