Coinciden en la necesidad de la medida y confían en que todo pase muy pronto

Presidentes de Hermandades y Cofradías valoran la situación de la suspensión de las procesiones

La tristeza y la desesperanza imperaban en las primeras horas en todas las hermandades y cofradías, tras la decisión acordada en la Junta Permanente convocada de manera urgente, para valorar la situación extraordinaria y excepcional por la que el país atraviesa, debido a la emergencia sanitaria por la crisis del coronavirus, que está dejando alarmantes cifras de contagio y de fallecidos y que ha llevado a la suspensión de las procesiones de la Semana Santa de este año. En Siete Días se ha pulsado el sentimiento de algunas de ellas y esta es la valoración que dejaban.

JÓVENES COFRADES

La representante de los Jóvenes Cofrades, Sandra Méndez ha señalado que la decisión es “acertada, valiente y responsable pero no por ello deja de ser amarga y dolorosa”. Ello, asegura, que ya han reiniciado el contador y que ha solo faltan 374 días para que “la luz ilumine una nueva y esplendorosa mañana de nuestro Domingo de Ramos”. La ilusión de los Jóvenes Cofrades, según Méndez, “sigue muy muy viva” y pronto retomarán su actividad y pondrán también el contador a cero para el primer Pregón del Capurucho.

LA CAÍDA

El presidente de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Caída, Guillermo Ochando habla de “frustración” con la suspensión de la Semana Santa de 2020.

Este año para la Caída era ilusionante ya que llevan trabajando desde  agosto de 2019 cuando se conformó una nueva directiva. Este año han afrontado “nuevos proyectos y aire fresco, sin perder la esencia de lo que nos une”.

 El I Concurso de Dibujo «Yo llevo a mi Cristo de la Reja» (se está llevando a cabo con alguna salvedad), la convivencia, la cena de Hermandad o la Insignia de Honor de la Caída, son algunos ejemplos de los actos que tenían planeados y que llevarán a cabo próximamente o el año que viene. Guillermo Ochando aprovechaba la ocasión para animar a todos los hermanos cofrades ante esta situación y alentar a que “las ganas e ilusión permanezcan intactas de cara a la próxima Semana Santa. Esto es sólo una mera caída, señalaba, de la que todos estamos obligados a levantarnos”

CRISTO DE LA SALUD

El recién elegido presidente de la Hermandad del Cristo de la Salud, Juan Valero señalaba a esta redacción que después del año pasado al que calificaba como «año negro» para la Semana Santa, nadie esperaba otra suspensión de esta Semana Santa. “Ha sido un palo grande con mucha tristeza, por el trabajo realizado, por la familia que también esperaba ansiosa esta semana, por mis hijos por ejemplo, y por supuesto para todos los hermanos que tanto esperamos esta semana al año. “Tenemos que mirar para adelante e ir preparando con la misma ilusión, o más si cabe, la Semana Santa que viene y pedirle al Cristo de la Salud, salud, y que todo esto pase pronto. ”¡Viva el Cristo de la Salud y Viva la Semana Santa jumillana!”, termonaba.

LA GUARDA

Miguel Ángel López, el presidente de la Cofradía de la Guarda del Cuerpo de Cristo, recuerda que con este son dos  años los que “nos quedamos en casa”. Este año por este “maldito virus que se está llevando tantas vidas por delante, sufrimiento, esfuerzo y la economía del que menos tiene”. Se sienten “apenados”, ya que iban a estrenar las nuevas andas restauradas para la Santísima Virgen María de las Penas, con sus nuevas damas anderas. A pesar de todo ello, señalan que siempre han “estado recogidos alrededor del  Yacente y de la Virgen. Este año debido a todos estos contratiempos hay algo que nunca había sucedido y es que en el Monasterio de Santa Ana permanece la imagen de la Virgen María de las Penas y en la Ermita del Sepulcro, en el Huerto del Monasterio, durante toda la Cuaresma y la Semana Santa está expuesto al culto el Cristo Yacente de la Guarda para rezarle, en ese lugar sagrado donde se conceden indulgencias, por haberse aparecido Cristo con la cruz a cuestas.

VERA CRUZ

“Pena y desilusión” es lo que manifiesta el presidente de la Hermandad de la Vera Cruz y el Santo Sepulcro, Eduardo López, especialmente este año por ser la primera Semana Santa después de su declaración como Fiesta de Interés Turístico Internacional. “Tranquilidad”, también según manifiesta, al saber que se ha tomado la decisión correcta para intentar entre todos que esta situación de pandemia que estamos sufriendo pueda ser controlada “lo antes posible”. El deseo de esta hermandad es que esta situación se solucione pronto, y cuentan con la “ilusión y esperanza” de poder realizar algún acto para celebrar esta declaración de Interés Turístico Internacional.

EL NAZARENO

La presidenta del Nazareno, Dolores Martínez Gandía apela a la “calma y la  responsabilidad” de todos sus hermanos y cofrades, sosteniendo que si “todos atendemos las indicaciones de las autoridades, pronto esto será una mala pesadilla”.

El sentimiento es de una “gran tristeza y preocupación” por la suspensión por segundo año consecutivo de la Semana Santa, manifiesta la presidenta, pero dada la situación considera que era algo “tremendamente necesario”. Apela a la  “colaboración y compromiso de todos hacia la Cofradía, ya que será imprescindible para seguir hacia adelante y hacer frente a nuestras obligaciones”. Finalmente desea que el próximo otoño, todos puedan disfrutar de las procesiones con “el júbilo que caracteriza a nuestro querido pueblo”. 

LA SOLEDAD

A la presidenta de la Hermandad de la Santísima Virgen de la Soledad, Carmen Herrera le embarga la más absoluta de las “tristezas, por no poder vestir y preparar a nuestra Virgen de la Soledad en Miércoles Santo para que Viernes Santo por la noche, llore y acompañe a nuestro Señor en el sepulcro”, señala.

Tras la “incertidumbre” del primer momento acerca de  la suspensión de las procesiones de Semana Santa, considera que  es “lo que debemos hacer en estas circunstancias y tenemos la obligación de hacerlo por vosotros, -manifestaba-, por nosotros y por todos”. Está convencida de que todo pasará y aunque podremos celebrarlo en otro momento, puntualiza “que nunca será igual”.

VIRGEN PRIMER DOLOR

La presidenta de la Cofradía de la Santísima Virgen del Primer Dolor, Unción de Jesús en Betania y Virgen Gloriosa, Pilar Guardiola asegura que su sentimiento es como el del resto de cofrades y toda Jumilla, “de tristeza, como si estuviese en un mal sueño -señala- del que está deseando despertar”.

 “Desde la Cofradía de la Santísima Virgen del Primer Dolor, acompañamos a toda la familia cofrade, -manifiesta en sus palabras-, en estos momentos tan difíciles que estamos viviendo”. Asegura que va a ser una Semana Santa diferente “en oración y en el confinamiento de nuestros hogares” e invita en nombre de la cofradía a celebrar los días de Pasión venideros, en la intimidad del hogar, “con esperanza y con la confianza que nos da la Resurrección”.   

SAN JUAN APÓSTOL

El presidente de la Hermandad de San Juan Apóstol, José Francisco Jiménez Molina, sostiene que “son momentos difíciles los que nos ha tocado vivir a los que llevamos la Semana Santa jumillana en nuestro corazón, y que vivimos y trabajamos por ella durante todo el año. Por tanto la suspensión de casi todos los actos de Cuaresma y todos los desfiles procesionales nos afecta en gran medida y más este año tan especial, que se celebraba la declaración de Interés Turístico Internacional”. Continúa señalando que “de todos los golpes hay que levantarse, y ahora esto nos obligará a vivir estos días de Pasión de forma diferente, más íntima y personal. Pasado el desánimo y abatimiento, solo nos queda ponernos desde ya a pensar y trabajar en la próxima, con ánimos renovados”.

CRISTO DE LA VIDA

José Carrión Ortega es el presidente de la Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo de la Vida y pulsada su opinión acerca de los últimos acontecimientos, señala que “sin duda es un escenario doloroso e inimaginable para todos, aunque necesario, sensato y coherente”. Al mismo tiempo confía “como no puede ser de otra forma, en que debe ser un escenario de vida y esperanza, es el momento de estar todos juntos, y es el momento de hacer hermandad hacia dentro”.

Para Carrión, “en esta ocasión, más que nunca, la Semana Santa tiene que estar viva en nuestro interior, y tendremos que vivirla de una manera muy especial, ofreciéndola por todos nuestros hermanos, por todos aquellos que sufren el dolor y las consecuencias de esta enfermedad, y aunque este año el Señor de la Vida y Nuestra Señora de la Esperanza, no crucen el dintel de la puerta del Perdón de Santiago, tienen que cruzar el dintel de nuestro corazón, de nuestra solidaridad y por supuesto el de nuestra fe”. Finaliza puntualizando que siguen quedando 19 días para Martes Santo …, “vivámoslos intensamente”.

TAMBORILERO DE HONOR

Otro de los protagonistas de la Semana Santa y más concretamente de las tamboradas es Antonio Valero, quien ostenta el cargo de Tamborilero de Honor 2020. Ha manifestado a esta redacción que “son días de mucho dolor y momentos de asumir decisiones muy complicadas de tomar”. Para Valero, el  2020 debía ser un año de celebración, tanto a nivel personal por su nombramiento como Tamborilero de Honor,  como a nivel general como jumillano ya que ésta sería la primera Semana Santa de Interés Turístico Internacional. “Mucho trabajo e ilusiones rotas, sentimientos contradictorios afloran estos días mezcla de desilusión y resignación”.

Agradece en sus palabras, “la entrega generosa de tantas personas que están ayudando en esta crisis, cada cual desde su responsabilidad y señala que los tamborileros y semanasanteros deben vivir estos momentos con un total compromiso ciudadano, con la solidaridad hacia las personas afectadas y con la confianza en nuestro querido Cristo de la Salud, -señala-, que en tiempos de prueba nunca nos deja de su mano, y nos sostiene nuestra esperanza. Todo pasa y juntos, somos más fuertes. Lo más importante siempre sobresale por encima de todo lo demás”.