Hace ya muchos años, Jumilla participó en el Bando de la Huerta a través de la Fiesta de Vendimia y bajando hasta la capital, la carroza de la Peña La Alborga. El pasado año, volvió a repetir experiencia, sin olvidar cuando la sardina salió de Jumilla. Aunque en aquel momento, el tema no estuvo exento de polémica, ya que al Ayuntamiento, y por tanto a los jumillanos, nos costó la fiesta lo que no está escrito, y nunca mejor dicho esto, ya que se utilizó una buena cantidad de euros, la mayoría de ellos ‘sin declarar’, es decir, que estuvieron llegando facturas imprevistas varios meses.
Jumilla no es que sea especialmente huertana. Sin embargo, nuestro pueblo cobra su protagonismo en capital, y lo aprovecha para vender nuestros atractivos, lógicamente, utilizando el vino como reclamo y mejor embajador.
Por ello, además de que los jumillanos se desenvolvieron una vez más por la Gran Vía como pez en el agua, también Jumilla repite en la Feria Regional de Turismo, donde la Ruta del Vino, las fiestas de la localidad y todos los atractivos de nuestro término municipal tienen su altavoz. Igualmente, los representantes de la Federación de Peñas de la Fiesta de la Vendimia participaron el lunes en la ofrenda de flores a la patrona de la capital, la Virgen de la Fuensanta.
En fin, que Jumilla tiene más que demostrada su capacidad de organización, sus múltiples atractivos y por tanto, la necesidad de contar con un lugar destacado en manifestaciones tan importantes como las Fiestas de Primavera de Murcia donde los espectadores de los desfiles, cuando ven pasar las flores de azahar quedan maravillados, pero cuando ven llegar la carroza de Jumilla repleta de vinos, pierden la cabeza y se olvidan de flores y pimentones.
Ahora solo falta, que este peso que Jumilla empieza a tener ya en muchas cosas, se manifieste y extrapole también a todos los ámbitos, tanto administrativo como político a nivel regional, porque para que quede claro, somos de Murcia y no de La Mancha.