La próxima jornada se enfrentan al Puntarrón

Gustavo López

El Jumilla CFS sigue sin poder brindar una victoria a su afición en el Carlos García. Después de 12 jornadas, su casillero en casa sigue vacío.
El pasado sábado, visitaba la cancha local el Sima Granada que venía con hambre de puntos para poder seguir enganchando a la parte de arriba. Además, a su llegada a Jumilla, ya era conocedor de que Melistar FS y Bujalance FS, primer y segundo clasificado, habían perdido sus respectivos encuentros. Por ello, el partido se presentaba de nuevo como una final para ambos equipos, aunque por diferentes motivos.
El Jumilla CFS contaba con el factor cancha, pero las largas posesiones granadinas fueron apagando poco a poco a una escuadra jumillana incapaz de frenar el estilo de juego diseñado por Rafa Romero, que combinaba a la perfección posesión y verticalidad. Así pues, y en una salida rápida al contragolpe, los andaluces establecieron el 0-1.
Apretaron los granadinos y lograron una renta de 0-3 que hacía pensar en lo peor para los nuestros.
Con ese resultado, Juan PIzarro pidió tiempo muerto. Esa pequeña reunión despertó al conjunto blanquiazul, el cual consiguió encontrar con mayor asiduidad la portería de Pantoja. No obstante, el arquero nazarí se mostró infranqueable. Así pues, con dicho resultado se llegó al tiempo de descanso.


Ya en la reanudación, Sima Granada FS dio un paso atrás obligado por la intensidad con la que salió el conjunto local. Jumilla CFS puso cerco sobre la meta visitante, encontrándose hasta en siete ocasiones con la madera. La mala puntería local contrastaba con la eficacia visitante, puesto que en una acción individual de Barranco, Chichi anotaba el 0-4 en propia portería.
La suerte no estaba de cara de los vinícolas, pero hasta el pitido final, todo es posible, y el Jumilla encontró el camino del gol con los tantos de Joaquín, Adrián Ortiz y Verdú. De esta forma, y con más de cinco minutos por jugar, el encuentro revivía en el Pabellón Municipal Carlos García.
La inercia de la remontada obligó a Rafa Romero a parar el encuentro. El técnico nazarí aprovechó el tiempo muerto para pedir tranquilidad y reordenar a los suyos, quienes acumularon varias posesiones para frenar el ímpetu local.
Con el partido de nuevo equilibrado, Jumilla FS apostó por el portero-jugador. Sin embargo, la superioridad numérica no le pudo salir peor a la escuadra de Pizarro. En su primer ataque de cinco, un tiro lejano de Barranco se convirtió en el 3-5. A pesar del gol, Jumilla mantuvo el ataque de cinco, encajando el 3-6 en otro contragolpe.
La próxima jornada, el Jumilla CFS viajará a Mula para enfrentarse al Puntarrón, un nuevo hueso que tendrá que roer para que le sirva como deseada transfusión.