Finalmente no se completaron los 17 kilómetros previstos, y la Ruta Nocturna Solidaria concluyó más allá de la 1 de la madrugada
Cincuenta senderistas en la noche del pasado viernes
La Ruta Senderista Nocturna Solidaria San Antón cumplió el pasado viernes su sexta edición, y lo hizo con una participación de cincuenta personas. Todos ellos recorrieron un trazado de 15 kilómetros, en lugar de los 17 previstos, para concluir más allá de la 1 de la madrugada nuevamente en el lugar de salida, Avenida Ronda Poniente.
Allí desembocó la ruta tras comenzar subiendo al Castillo, continuar por El Cabezo, y pasar finalmente por la Cañada del Judío, para desembocar finalmente en Avenida Ronda Poniente.
Para el presidente de la Asociación de Vecinos del Barrio de San Antón, organizador del evento, todo salió bien. “Desde nuestra perspectiva fue un éxito. Una noche muy tranquila, y la gente quedó conforme”, aseguraba. No obstante no se descartan cambios en el recorrido para próximas ediciones.
Además y como todos los años se recaudaron alimentos para los más necesitados, entregados por los senderistas, y que fueron a parar a Protección Civil para su posterior distribución.
El mal olor fue protagonista
La nota desagradable la pusieron los malos olores que protagonizaron buena parte del recorrido, y que se acrecentaba en puntos concretos como El Castillo o El Cabezo.
Una situación que viene prolongándose desde hace unos meses en Jumilla, cuyo origen no se ha identificado, y que ha afectado a esta Ruta Senderista de San Antón, que no descarta modificar el trazado para años consiguientes.
