Mayte Salmerón Almela
Ya llevo varias semanas hablando de autoras femeninas y creo que ha llegado el momento de que me centre en escritores del género masculino y de sus obras que más relacionadas están con el verano.
—Empezaré con uno de mis libros favoritos de Carlos Ruíz Zafón, El príncipe de la niebla, una novela juvenil que no cae en los tópicos propios de esta. El misterio y el terror están más que asegurados en su lectura que te sitúa en el verano de 1943.
Max y su familia deciden cambiar de domicilio y trasladarse a una casa junto a la costa Atlántica. Desde su llegada, Max va percatándose de los diversos sucesos sin explicación que envuelven la ciudad. Ya en la propia estación descubre que el reloj funciona pero al revés; además, la casa en la que van a vivir tiene una historia detrás que poco a poco irán descubriendo los diferentes miembros de la familia. Lo más llamativo de la vivienda es —sobre todo— el jardín con unas estatuas de piedra que representan un circo y que, inexplicablemente, van cambiando de posición de un día para otro sin que nadie sea el responsable de ello. Es un libro que combina a la perfección escenas muy gráficas de un día de playa y cierto halo de misterio que hará que no quieras parar de leerlo.
—Son de Mar de Manuel Vicent, Premio Alfaguara de novela 1999.
Ya el título no deja lugar a dudas de que se trata de una historia que tiene como protagonista el mar, y que además tiene lugar en pleno verano de la costa valenciana.
Comienza con un cadáver que, vestido de novio, aparece flotando por las aguas del Mar Mediterráneo. Enseguida reconocen que el cuerpo es el de Ulises Adsuara, pero lo curioso del caso es que Ulises ya había fallecido uno años antes y también en las mismas circunstancias. A raíz de estos acontecimientos todos los allí presentes se preguntan si realmente es él y cómo puede ser posible. La genialidad del escritor en este caso no es solo la premisa que evoca desde las primeras páginas sino el lenguaje coloquial y vivo de todos sus personajes, haciendo que sea una lectura ligera pero a la vez muy enriquecedora.