El equipo humano de la funeraria les rindió un sencillo homenaje

M.C.C.V.

En la dura crisis sanitaria vivida en todo el mundo, muchos han sido los servicios esenciales continuaron su trabajo para atender a la población. Uno de estos fue, seguro muy a pesar suyo, las funerarias.
En nuestra localidad, Tanatorio Jumilla, con todos sus medios materiales y humanos, estuvo incansablemente ofreciendo sus servicios. Pero en ese caso, en condiciones muy particulares e intentando acompañar, más si cabe, a las personas que durante esos meses perdieron a un ser querido, y que en la mayoría de ocasiones, por las circunstancias que se vivían, no pudieron recibir el calor de sus familiares y amigos.
Y ahí estaban todos y cada uno de los integrantes del equipo de Tanatorio Jumilla para tener un gesto o una mirada de apoyo a los que sufrieron la pérdida de una persona querida.

Corona de laurel

En recuerdo a todos los fallecidos de nuestra localidad, en especial a los que nos dejaron en plena pandemia y cuyos funerales no pudieron ser oficiados, Tanatorio Jumilla depositó, una corona de laurel en la capilla del cementerio.
Fueron Agustín Gómez y Rosa Molina, en representación de todos sus compañeros, los encargados de realizar este acto simbólico que, según el gerente de Tanatorio Jumilla Pedro Martínez, “ha sido un sencillo homenaje a todos ellos”.