Tras el reciente éxito (otro más) de organización y participación este pasado fin de semana de la Barbudo Trail Jumilla 2017, la prueba se ha convertido en un referente deportivo ya no solo de la localidad, sino de todo el panorama regional. El Grupo Hinneni sigue apostando fuerte por este evento, y los evidentes resultados derivados permiten a la población tomar constancia de la trascendencia que supone para Jumilla atraer a doscientos foráneos, que además se van encantados con el magnífico trato humano dispensado, y que pasan automáticamente a convertirse en los mejores embajadores posibles.

Demostrada la eficacia de esta fuerte pero recompensada implicación, así como las consecuencias de la misma, se echa de menos una repercusión similar en los eventos organizados por el propio Ayuntamiento de Jumilla, que suelen pasar desapercibidos fuera de nuestras fronteras, y muchas veces también dentro, y que no cuentan con el suficiente compromiso por parte de las distintas concejalías. Se requiere una mayor representación del Gobierno local en las pruebas deportivas y eventos culturales realmente relevantes en Jumilla, ya sea desde la organización directa o desde una mayor colaboración logística y de subvenciones que, hasta el momento, se antojan escasas.

Son los colectivos, clubes deportivos y entidades privadas los que tiran del carro y soportan el mayor peso y la responsabilidad de aquellos eventos que quedan en la retina de los jumillanos. Como los Premios Siete Días Jumilla, que a cada edición sigue superándose y atrayendo a lo más selecto de nuestra sociedad, contando además con una destacada representación gubernamental tanto local como regional. En contraposición la Gala del Deporte 2017, que a solo una semana de su celebración sigue sin tener premiados oficiales.

La falta de previsión, y también de esa pizca de cariño necesaria para que el trabajo resultante brille y resplandezca, sigue siendo una asignatura pendiente para el excelentísimo.