Se acabaron las fiestas, y de qué manera, aunque todo es reconducible de cara al próximo año, y contamos con la predisposición de todas las partes. Lo cierto es que hemos acabado ya con todas las celebraciones estivales, incluso con las de la Torre del Rico, que dicho sea de paso, recomendamos no perdérselas a quién no las haya vivido, por la cantidad de gente que disfruta de ellas y además participa.
Volvemos a la rutina, que no tiene porqué ser mala, simplemente rutina, disciplina de horarios, todo un poco más establecido y más ordenado. A partir de la semana próxima tocará recorrer todos los centros educativos del municipio para dejar constancia de las ganas que tienen todos los escolares de volver a sus aulas. Los que lo hacen por primera vez, los que repiten de nuevo (no de curso, aunque también), y nosotros, que allí estaremos para contárselo la próxima semana. Se inicia así el nuevo curso escolar para los chavales de Primaria, y un par de semanas más tarde lo harán los de Secundaria y Bachiller.
Pero los que también inician curso serán nuestros flamantes políticos, los casi recién llegados, porque algunos ya tienen bagaje y lo han demostrado en gobierno y oposición (y viceversa), estos últimos días, pero otros todavía casi no se han estrenado, vamos, que no los hemos oído hablar aún en esta legislatura.
Así que lo que esperamos de toda esta rentré, es trabajo, actividad, gestión y un ir y venir de deberes escolares, de quehaceres políticos y tareas laborales, pero eso sí, señores, con respeto, actitud positiva, discrepancias que las habrá y que son necesarias, pero siempre siendo capaces de construir juntos y de consensuar, mirando siempre en la misma dirección, en la de mejorar lo nuestro, lo que de verdad nos interesa y lo que de verdad nos une, Jumilla.
Estamos ante una nueva estación, un nuevo ciclo, un nuevo curso, una nueva etapa. ¿Rutina? ¿Quién dijo rutina? Me río yo de la depresión post – vacacional.