Editorial
Después de lo vivido el pasado domingo en la entrega de los Premios Siete Días Jumilla, lo mejor, y creo que único que se puede decir, es GRACIAS. Y hay que hacerlo en mayúsculas porque entre todos, logramos un día redondo, único incluso, donde la emoción fue uno de los denominadores comunes, y el cariño recibido fue desbordante, con un Teatro Vico lleno hasta la bandera, y donde se logró un ambientazo perfecto en la comida posterior a la entrega que sirvió de homenaje a los galardonados de esta edición.
Gracias a la vitalidad del Centro de Mayores, la formación en el Colegio Nuestra Señora de la Asunción, la ciencia de José Luis Lencina Gutiérrez, los valores de Loren Martínez Bernal, la lucha de Pedro García Albert, la paz del Monasterio de Santa Ana, el sentimiento de los Armaos del Cristo y el prestigio de Guzmán Ortuño Pacheco. Todos son Jumilla, y todos son Siete Días Jumilla.
Por último, gracias a todos los asistentes, lectores, anunciantes, representantes de colectivos, asociaciones, entes, organismos, empresas, administraciones, patrocinadores, familiares, amigos… fue un día perfecto, inolvidable, que nos recarga de energía y nos carga de responsabilidad.
Muchas gracias a todos, enhorabuena a los premiados y ayúdennos a seguir haciendo lo que más nos gusta cada semana: Escribir la historia de Jumilla y dejarla impresa en una hemeroteca que nuestros hijos disfrutarán y nuestros nietos admirarán.