La coalición denuncia que la nueva privatización de los jardines del PSOE ascendería a cerca de 1 millón de euros al año

Lola Tomás

La coalición política de IU Verdes-Podemos, que concurre de manera conjunta a las elecciones municipales del 28 M, ha hecho público, en el marco de la campaña electoral, que aposaría por la gestión pública del servicio de jardines. Denuncian que la nueva privatización de los jardines del PSOE, ascendería a cerca de un millón de euros al año.

Argumentos

Sostienen que “tras los muchos y graves problemas con la empresa que ha gestionado la mayoría de jardines, el PSOE, a pesar de autoproclamarse de izquierdas, vuelve a apostar todavía más, por una privatización del servicio de mantenimiento y limpieza de jardines con empresas privadas, con contratos de 1 mes, de 4 meses y no sabemos si para mucho más tiempo. Además, el coste de unos 83.000 euros mensuales (1.000.000 de euros al año) es mucho mayor que el anterior”.
La alianza de estas dos fuerzas políticas, afirman que son muchos los jumillanos que han podido ver que “la gestión de los jardines ha sido muy deficiente, con falta de limpieza, ausencia de flores en los jardines casi todo el año, falta o exceso de poda según les venía mejor, falta de planificación en las plantaciones y muchas talas de árboles como consecuencia de múltiples factores”.


Sobre los trabajadores de la contrata, denuncian que “han sufrido innumerables retrasos en el pago de salarios e incluso deudas que ojalá puedan cobrar. El Ayuntamiento, por lo que se ha manifestado, ha pagado de forma razonable a esa empresa, por lo que se puede confirmar que, con privatizaciones, los trabajadores no tienen garantía alguna de cobro, aunque a las empresas se les pague puntualmente, de hecho, la mayoría de empresas comienzan siendo muy cumplidoras con los trabajadores y terminan pagando tarde, mal y a veces nunca”.
Las leyes en vigor, permiten que el Ayuntamiento recupere la gestión de los servicios, “y se viene demostrando en muchos sitios mejora el servicio y es bastante más barato, ahorrando el IVA y el beneficio empresarial. Todo eso sin contar las movilizaciones, manifestaciones, juicios entre empresa y ayuntamiento, cuestiones todas ellas que no pueden ser valoradas pero que se terminan pagando por los ciudadanos y los jardines”.