La presión de los 5.000 espectadores que acudieron al Municipal de Linarejos no hizo mella en los jugadores del FC Jumilla, que fueron mejores que su rival y gozaron de las ocasiones más claras para imponerse por 0-1. Jorge Perona hizo justicia a lo ocurrido sobre el césped materializando un lanzamiento de falta por toda la escuadra para mantener a los vinícolas fuera de los puestos de descenso.
El Linares se jugaba la vida y preparó una fiesta por todo lo alto. Antes del comienzo del partido Lopito fue homenajeado por sus cien partidos con la azulilla. Los laureles no despistaron al guardameta jienense, que terminaría erigiéndose en el mejor de los suyos. Primero salvó un mano a mano con Chirri, y después estuvo rápido para detener un disparo envenenado de Paolo Etamané. Los locales apenas inquietaron a Seral en el primer acto, y se fueron vivos a vestuarios gracias a la actuación de su guardameta.
Sin comerlo ni beberlo, en el tiempo de descanso el FC Jumilla volvía a estar en descenso, y es que el gol del Villanovense en su duelo ante el Granada B obligaba a los vinícolas a conseguir los tres puntos.
La reacción jumillana no se hizo esperar. A los cuatro minutos de la reanudación una falta en la frontal del área hizo relamerse a Jorge Perona, especialista en esta suerte de disparo. El valenciano cogió el balón y lo metió por la escuadra. Lopito llegó a tocarla, pero el ajustadísimo lanzamiento se estrelló en el palo y se metió para adentro.
Con desventaja en el marcador el Linares no tuvo más remedio que dar un paso adelante. Los locales se dedicaban a meter balones arriba y los vinícolas, que se echaron atrás para defender los tres puntos, sufrieron más por lo ajustado del resultado que por las ocasiones reales de peligro contra su portería.
Hubo un par de acciones en las que los jienenses reclamaron penalti, pero Carbonel Hernández no señaló nada. Por contra el colegiado sí consideró oportuno mostrar su segunda amarilla a Belda, que encaró el camino de vestuarios dos minutos antes de los noventa reglamentarios.
Otra final que consigue sacar adelante el FC Jumilla, asaltando el Municipal de Linarejos para dejar helada a una grada que vivirá un infierno estas últimas tres jornadas. El Linares duerme en puestos de descenso mientras los vinícolas respiran aliviados con una ventaja de dos puntos.