Mantienen contacto a diario con ellos y les envían actividades. Los técnicos reconocen: “Les echamos de menos y necesitamos el contacto personal”.
M.C.C.V.
Desde el pasado 12 de marzo, y dadas las características de especial vulnerabilidad de los usuarios a los que atienden, el IMAS ordenó el cese de actividades presenciales en el Centro Social de Personas Mayores de Jumilla, cerrando sus puertas desde ese día y hasta el momento.
Según informan desde el mismo “pese a no haber actividad presencial, desde el IMAS se ha establecido para el equipo técnico (director y trabajadora social) el sistema de teletrabajo, mientras que los ordenanzas están en situación de expectativa, por si surge la necesidad de cobertura de plazas en alguno de los centros”.
Por medio del teletrabajo, los profesionales del centro siguen manteniendo contacto con los usuarios. De esta forma, diariamente, se envía, mediante whatsapp, ejercicios de estimulación cognitiva: Memoria, atención y lógica, entre otros.
Además continúan realizando los talleres de Tai-Chí, Yoga restaurativo y Memoria, on line con dos clases semanales remitidas por los propios monitores, así como el envío de tutoriales de gimnasia, yoga, pilates,… para el conjunto de usuarios del centro para que mantengan la actividad física desde casa.
Asimismo les remiten información general de interés, casi a diario, referida al Estado de alarma, medidas de prevención y protección, desescalada, estafas, teléfonos de interés (comercios con reparto a domicilio, Servicios Sociales, Cruz Roja, Colegio de Psicólogos). También resuelven dudas o consultas que tienen los usuarios.
Desde el Centro Social de Personas Mayores además hacen un seguimiento telefónico semanal a usuarios en situación de especial vulnerabilidad, por vivir solos, en zonas aisladas, presentar enfermedades previas, para conocer cómo se encuentran y si precisan en un momento dado de la movilización de recursos o de familiares.
Por último, realizan una revisión y actualización de los programas técnicos de cada uno de los cursos y talleres del centro de cara a la convocatoria del próximo curso.
AYUDA A DOMICILIO
Igualmente desde la Dirección General de Personas Mayores, se ha encomendado el seguimiento semanal de personas en situación de dependencia que habían solicitado el Servicio de Ayuda a Domicilio y que no se habían resuelto los expedientes, para valorar su situación y movilizar los recursos precisos en caso de ser necesario.
Los técnicos del centro afirman que “la situación está siendo, como para el resto de la población, de incertidumbre, respeto y precaución, pero a la vez lo valoramos como una experiencia novedosa y distinta en la forma de trabajo y contacto con los usuarios”. “Está resultando, añaden, una oportunidad para valorar y planificar la forma de implementar en el centro este tipo de trabajo, que quizá nos acercaría a un número mayor de personas, especialmente aquellas que no pueden acudir presencialmente al centro por diferentes motivos”.
Pese a ello, reconocen que “echamos de menos y necesitamos ese contacto personal con nuestra gente, con nuestros abuelos y esperamos que esta pandemia se vaya controlando para poder volver a ello, aunque de momento, desde el IMAS no hay una fecha probable de reapertura, ya que cuando llegue ese día, tenemos que poder garantizar la seguridad y salud de nuestros usuarios, así como la de los propios trabajadores”.